Trabajando la sombra (parte 2)

EJERCICIO 2

Vamos a trabajar la sombra desde otro punto de vista. Si en el ejerc icio anterior utilizamos la Ley del Espejo. Hoy vamos a buscar en nosotros, nuestra SOMBRA LUMINOSA. Es decir, nuestros mayores dones y talentos, que se encuentran ocultos en nosotros. Aunque parezca mentira, nuestras capacidades más hermosas y bellas, suelen estar también en la sombra, porque desde pequeños las escondemos para que los demás no las vean. Esto se relaciona directamente con lo que siempre digo de que debemos ser un faro para iluminar al mundo. Un faro que emite su luz desde el corazón y que se permite brillar.

Pues bien, el trabajo es el siguiente:

Siéntate en un lugar tranquilo en el que nadie te moleste. Respira profundamente al menos unas 3 veces o incluso si te apetece, medita un rato pidiéndole a los ángeles que te acompañen en este trabajo de sanación y amor hacia ti mismo. Puedes invocar a tus ángeles de la guarda, y  a los Arcángeles Miguel, Rafael, Metatrón y Raziel.

Cuando sientas que te encuentras relajado, vas a visualizar cómo sería tu mundo ideal, detalle a detalle, cómo es ese lugar, cómo son las personas que habitan en él, a qué se dedican, cuáles son los paisajes, hay animales o no, coches o no, flores o naturaleza. Píntalo de los colores que tú quieras. No te preocupes de que sea real, de que sea una copia de lo que conoces. Simplemente libera a tu imaginación.

Una vez que tengas ese mundo creado sitúate tú en él, y mira qué es lo que estás haciendo, cuál es tu profesión si es que la tienes, qué es lo que te hace feliz, cómo es tu carácter.

Vas a encontrar cosas muy curiosas como que si te creías serio, te veas como un payaso, si creías que eras triste, te veas absolutamente feliz y sonriente. Si eres por ejemplo un oficinista, a lo mejor te dedicas a ser un mago o un humorista. Siéntete libre de visualizarte tal y como crees que tú serías en ese mundo perfecto e ideal.

Mantente en esa situación al menos unos 10 o 15 minutos. Puede ser que pases distintas fases, que ahora seas el payaso y luego el político, o que primero seas rico y luego pobre. No importa, permítete disfrutar de tu yo ideal.

Cuando pase ese tiempo, abre los ojos y vuelve al aquí y ahora. Y ahora, recuerda, ¿qué parte de ti has visto en esa visualización que no admites de tu Ser? ¿qué cualidades crees que no tienes y que en cambio has visto en la visualización? A lo mejor te has visto como un gran pintor y resulta que dejaste el dibujo en tu vida real porque te dijeron que te morirías de hambre. O resulta que te ves cantando y llenando grandes escenarios y en la realidad no te atreves a cantar salvo en la ducha.

Mi querido amigo, eso que has visto de ti, son tus verdaderos dones y talentos. Esos que tienes ocultos pero que emiten una luz capaz de iluminar el Universo entero.

Todo eso eres tú. Date las gracias por permitirte verlo y anímate a sacar fuera esas cualidades que has visto visualizando. Realza tus talentos, todo aquello que te haga gozar y vivir con pasión. Admite que no te conocías tanto como creías, que eres una persona con muchísimas facetas pero que todas eres tú. Descubrirse es un auténtico placer.

¿Ya te has encontrado? Bienvenido a tu SOMBRA LUMINOSA