Sobre Mí
Con trece años, ya usaba unas cartas de tarot que me habían regalado en una revista adolescente. Con diecisiete, jugaba con el péndulo y leía las líneas de las manos. A los veinticinco, ponía velas a los Ángeles y le pedía al Arcángel Miguel que me ayudara y solucionara mis problemas. Nunca pensé que lo que yo hacía era algo raro o diferente, creía que todos los jóvenes y adolescentes, tenían intereses parecidos a los míos.
Pero no fue hasta el año 2014 en el que me di cuenta de que los problemas que tenía, mis frustraciones, el no sentirme a gusto con lo que había sido mi vida hasta entonces, no tenían su origen fuera, si no que estaban dentro de mí. Ahí, decidí cambiar mi actitud y mi propio ser y comencé a hacer cursos espirituales de todo tipo. Leí libros y escuché conferencias. Había entrado en el mundo de la Consciencia y por fin, entendía que el Universo era “otra cosa”. En uno de esos cursos, el Arcángel Miguel se presentó ante mí en una meditación y me dio un mensaje sobre quién era yo. Entonces, decidí investigar el mundo de los Ángeles. Ni siquiera sabía que nos podíamos comunicar con ellos ni que había una autora americana llamada Doreen Virtue, que había creado la Terapia Angelical.
Les pedí a los Ángeles que me guiaran para aprender a transmitir sus mensajes y a base de señales, tras estudiar también en España, terminé haciendo un Máster Angelical en Sedona (Arizona-USA), con Charles Virtue (hijo de Doreen), que terminó de encauzarlo todo.
Mi mundo entero cambió. Por fin entendí que la soledad que había vivido durante toda mi vida, era para que me descubriera a mí misma y porque tenía algo que hacer en el mundo espiritual. Ya nunca estaría sola, porque los ángeles, y mis guías y maestros, estarían siempre conmigo. Era una trabajadora de la luz, y ya era hora de que cumpliera con mi papel en el mundo.
En este momento, sigo creciendo espiritualmente. Cumplo cada día con mi misión de vida y hago lo que es mi pasión, poder compartir el mundo de los Ángeles con quienes deseen conocerlo. Sigo formándome y no sé lo que me deparará el futuro, pero sí sé que quiero seguir haciendo lo que me gusta, trabajar en el mundo espiritual. Para eso nací, y por ello tuve y tengo que pasar mis diferentes aprendizajes.
Hoy estoy aquí a tu lado, para que tú también puedas encontrar tu propósito de vida, el más importante, amar y gozar de la vida, ya que somos unos privilegiados en esta Tierra. Mi mensaje hoy para ti, es que te atrevas a ser quién eres, siguiendo a tu corazón y que recuerdes siempre que tu sabiduría interior es superior a cualquier guía que puedas recibir. Deseo que vivas desde la ilusión y la valentía, sin que el miedo, la duda o el dolor, puedan apagar tu maravilloso brillo. Te mereces sólo por existir lo mejor de la vida y deseo con toda el alma que siempre mantengas la FE y la ESPERANZA.
Gracias por compartir tu camino conmigo. Gracias por iluminarme con tu maravilloso brillo. Gracias por permitirme estar contigo hoy. Gracias por Ser. Bendiciones de luz y amor,